Fobias al ruido en perros: qué esperar y cómo ayudar

Comprender la fobia al ruido

La fobia al ruido es una afección común en los perros, que desarrollan un miedo intenso a los sonidos fuertes, como las tormentas, los fuegos artificiales, los disparos o incluso las aspiradoras. A diferencia de las reacciones típicas ante ruidos repentinos, los perros con fobia al ruido pueden experimentar ansiedad extrema, lo que puede resultar angustiante tanto para la mascota como para el propietario.

Qué esperar

Cuando un perro tiene fobia al ruido, los síntomas pueden variar de leves a graves, dependiendo de la sensibilidad del perro y de la intensidad del ruido. Esto es lo que se puede esperar normalmente:

• Inquietud y nerviosismo: Su perro puede volverse incapaz de tranquilizarse, caminando nerviosamente de una habitación a otra o dando vueltas en círculos.

• Jadeo y babeo: incluso cuando la temperatura es fresca, un perro puede jadear excesivamente o babear cuando está ansioso.

• Temblores: los temblores son una respuesta física común al miedo en los perros, y pueden temblar durante o incluso antes del evento ruidoso.

• Intentos de huida: los perros con fobia al ruido pueden intentar escapar de su entorno, ya sea arañando puertas, excavando bajo las vallas o incluso intentando saltar por las ventanas.

• Esconderse: muchos perros buscarán refugio en un espacio tranquilo y cerrado, como debajo de la cama, en un armario o en el cuarto de baño.

• Comportamiento destructivo: En su pánico, los perros pueden morder muebles, arañar paredes o puertas, o tirar objetos en su intento por huir del ruido.

• Aumento de la vocalización: Es posible que notes ladridos, gemidos o aullidos excesivos cuando tu perro reacciona a los sonidos que le asustan.

• Dependencia: Algunos perros pueden pegarse a sus dueños, buscando constantemente seguridad y consuelo.

• Pérdida del control de la vejiga o los intestinos: en casos graves, el miedo puede hacer que el perro orine o defeque involuntariamente.

Qué no hay que esperar

Aunque la fobia al ruido puede provocar una serie de comportamientos, hay algunos que son menos comunes o poco probables, y reconocerlos puede ayudarle a gestionar sus expectativas:

• Mejora inmediata sin tratamiento: la fobia al ruido rara vez mejora por sí sola.

Sin intervención, el miedo de un perro suele empeorar con el tiempo. Es de esperar que el tratamiento sea un proceso gradual que implique la modificación del comportamiento, el control del entorno y, posiblemente, la administración de medicamentos.

• Comportamiento constante ante todos los ruidos: No todos los ruidos provocan la misma respuesta. Por ejemplo, un perro que tiene pánico a los fuegos artificiales puede no verse afectado por las tormentas. Las fobias son muy específicas y pueden desarrollarse ante determinados sonidos, mientras que otros apenas provocan ansiedad.

• Receptividad al adiestramiento durante los episodios de ruido: Cuando un perro se encuentra en medio de un ataque de pánico provocado por el ruido, a menudo está demasiado asustado para responder al adiestramiento o a las órdenes. Es importante saber que no es el momento de introducir sesiones de adiestramiento ni de esperar obediencia.

Cómo controlar la fobia al ruido

Controlar la fobia al ruido requiere paciencia y constancia. A continuación se indican algunos enfoques que puede considerar:

• Cree un espacio seguro: Proporcione un área tranquila y cerrada donde su perro pueda refugiarse durante los eventos ruidosos. Puede ser una jaula, un armario o una habitación insonorizada.

• Enmascaramiento del sonido: Utilice máquinas de ruido blanco, música relajante o ventiladores para ahogar el ruido desencadenante. Incluso hay listas de reproducción diseñadas específicamente para calmar a las mascotas ansiosas.

• Desensibilización y recondicionamiento: exponga gradualmente a su perro al ruido a un nivel bajo mientras le proporciona refuerzos positivos, como golosinas o elogios. Con el tiempo, esto ayudará a reducir su respuesta de miedo.

• Terapia con feromonas: productos como los difusores, sprays o collares de feromonas calmantes UnRuffled Pets® pueden ayudar a aliviar la ansiedad.

• Medicación: para perros con fobias graves al ruido, los veterinarios pueden recomendar medicamentos ansiolíticos o sedantes para ayudarles a sobrellevar los acontecimientos estresantes.

• Mantén la calma: los perros suelen captar el estado emocional de sus dueños. Mantener la calma y la compostura puede ayudar a tranquilizar a tu perro y hacerle ver que no hay ningún peligro real.

Qué no hay que hacer

• No castigue el comportamiento: Castigar a un perro por sus reacciones motivadas por el miedo solo aumentará su ansiedad y puede empeorar la fobia.

• Evite tranquilizar en exceso: Aunque es natural querer consolar a su perro, mimarlo en exceso puede reforzar el comportamiento ansioso. Es importante proporcionar una presencia tranquila y relajante sin reforzar la respuesta de miedo.